jueves, 28 de octubre de 2010

Y si...

¿Y si vuelvo a escribir algún día? A esto de Néstor no lo dejo pasar, lo juro!

viernes, 21 de agosto de 2009

El homenaje que se hizo esperar.

30.000 personas murieron en este país para que podamos ver el mundial gratis por Canal 7 treinta años después!
Gracias presidenta!

viernes, 10 de abril de 2009

El Sepelio Bananero

El 31 de marzo de 2009, probablemente constituya el antecedente de un futuro feriado. En algunos años, se decretará seguramente que recordemos a esa fecha como "El día de la democracia" o algo similar. Lo juntamos con el 2 de abril y tenemos otro fin de semana largo.

La muerte de Raúl Alfonsín destapó una tristeza colectiva difícil de explicar. El cortejo fúnebre de cien mil personas hacia el cementerio de Recoleta era para mí totalmente inesperado. Un ex-presidente que terminó tan mal su mandato, que hace 20 años era el piantavotos número uno de la Argentina, no prometía semejante movilización espontánea de gente para darle el último adiós. Y es raro ver tanta gente movilizada detrás de un político sin la promesa de un plan trabajar o algo similar.

Empecé entonces a hacer memoria y a entender un poco que si él terminó tan mal su mandato, fue porque nunca estuvimos como país a su altura. Eso se entiende más a la distancia, cuando vimos la calidad de líderes que lo sucedieron.

Somos una sociedad bananera, no cabe duda. Argentina está compuesta por un pueblo básicamente irresponsable, con nociones casi nulas de civismo, con una honestidad más que dudosa y sobre todo eso, egoísta. Nunca jamás reconoceremos lo mal que hacemos las cosas, para eso siempre podremos culpar a los políticos como si fueran extraterrestres que bajaron de una nave espacial para gobernarnos y someternos a su corrupción.

¿Alguien toma conciencia de la importancia histórica del juicio a las juntas? No. Para esta sociedad bananera fue un juicio más. Algo que se tenía que hacer y que era inevitable. No miramos a nuestro alrededor para darnos cuenta que el resto de los países del continente aplicaron leyes de amnistía. No miramos el caso de Chile -el peor de todos- con una dictadura fuertemente personalista sobre Pinochet, que terminó casi al final del mandato de Alfonsín y además, al poco tiempo se le dio al dictador el cargo de "senador vitalicio".

Nadie entendió, en la ignorancia que nos caracteriza, que ningún otro país se atrevió a juzgar a sus dictadores para no poner en riesgo la democracia incipiente y debil. Era mucho riesgo juzgar a militares en actividad con el apoyo de gran parte del ejército y Alfonsín lo corrió. Nunca lo apreciamos. Cuando la situación era insostenible dictó las leyes de obediencia debida y punto final. Era eso o correr riesgos mucho mayores.

Para este pueblo bananero, con sus medios de comunicación bananeros y sus políticos bananeros, esas eran las "leyes de la impunidad". Era dejar a los asesinos sueltos porque claro, para nosotros ese era un juicio más y como tal, la decisión de darle un final abrupto no era más que un arreglo espúreo con los militares. Nunca entendimos nada. Ni la importancia, ni el costo ni la magnitud del juicio. Protagonizamos un hecho inédito en la historía de toda América como si fuera un partido de fútbol.

Alfonsín fue el último presidente con un proyecto de país. Tampoco lo entendimos. Cuando su gobierno decaía, convocó a Rodolfo Terragno seducido por las ideas de su libro "La Argentina del siglo XXI". Entendía que las empresas del estado necesitaban un componente privado como socio estratégico (no como dueño) para funcionar con más eficiencia. Intentó asociar a Aerolíneas Argentinas con la Scandinavian Airways System (SAS). El estado se quedaba con el 51% de las acciones de Aerolíneas, el presidente, el vice y siete de los doce miembros del directorio. SAS ponía 204 millones de dólares (de 1988) por el 40% de la empresa y el personal recibía el 9% restante en acciones. Todo estaba listo para firmarse, pero nosotros, mientras pelábamos la banana, creímos que se estaba entregando el país... nos dejamos llevar por los mismos peronistas que boicotearon la venta para terminar malvendiendo la empresa unos años después. Hoy en día es la privatización mas vergonzosa de la década del 90.

Menem buscaba su reelección en las elecciones de 1995 pero la constitución impedía a un presidente presentarse a un segundo cargo consecutivo con lo cuál era necesaria una reforma constitucional.

Era el mejor momento del oficialismo, el 1 a 1 todavía no daba señales del desastre que iba a provocar y el presidente contaba con una imagen positiva difícil de mejorar. El peronismo fue obteniendo el apoyo de los gobernadores y legisladores radicales para convocar a un plebiscito sobre la necesidad de la reforma y claramente iba a ser favorable a las aspiraciones del gobierno.

Entonces el 22 de octubre de 1993 el presidente Menem sancionó el Decreto 2181/93 convocando a una consulta popular voluntaria para que la ciudadanía se expresase respecto a la reforma constitucional que debería realizarse el 21 de noviembre.

Era claro que lo único que le interesaba al peronismo era la reelección y también era claro que la iba a obtener. Alfonsín tuvo varias reuniones con Menem en la casa del ex canciller Dante Caputo y surgió el famoso pacto. El radicalismo permitía una nueva y única reelección presidencial y a cambio, el peronismo incluía en la Constitución Nacional la autonomía de la Ciudad de Buenos Aires, la creación del Consejo de la Magistratura, elección directa de senadores, extensión del período de sesiones ordinarias del Congreso de 4 a 8 meses, la figura del Jefe de Gabinete, el sistema de ballotage para definir una elección, la reducción del mandato presidencial de 6 a 4 años y un largo etcétera. El 22 de agosto de 1994, luego de las elecciones constituyentes, fue sancionada la nueva Constitución Nacional.

Vuelvan a releer por favor el párrafo anterior. Ese pacto constituía una gran reforma institucional y electoral, pero... un pueblo bananero no está en condiciones de entenderlo. Para nosotros, el pacto de Olivos fue un acuerdo corrupto para que Menem vuelva a ser presidente.

En 1995, Menem gana con el 51% de los votos. Mejor porcentaje aún que en 1989. La reforma solamente posibilitaba que se presente, pero nosotros mismos posibilitamos que él vuelva a ser presidente. Luego... nadie reconocía que lo había votado. La pregunta por aquel entonces era "¿quién lo votó?".

Los medios de comunicación, ante el desconcierto popular de un pueblo que no entendía que su voto era decisivo, debía buscar un chivo expiatorio para que la gente no se suicide. El resto es historia conocida. Alfonsín pactó y nos "obligó" a tener a Menem cuatro años más. Nosotros no somos responsables de nada.

Así somos y así nos va. Esperamos que algún día un gran lider nos saque del desastre pero cuando lo tengamos delante de nuestras narices, lo vamos a ignorar. O a boicotear. O a culpar de nuestros defectos. O todo junto.

Mientras tanto, vamos a esperar mucho tiempo para darnos cuenta de las cosas. Debimos haber apoyado a Alfonsín cuando era presidente, no cuando se murió. Pero así somos.

A propósito... ¿Vieron que caro está el kilo de bananas?

sábado, 27 de diciembre de 2008

El Inepto Social En Su Red Idem

Pensé también en ponerle “El inepto social II, la venganza”, pero sería un título injusto cuando la estrella de este texto no es precisamente, el inepto social.

Voy a escribir en esta ocasión acerca del nuevo fenómeno de Internet, mas conocido como “redes sociales”. ¿Qué hace entonces un inepto social en una red social? A simple vista, suena contradictorio, es como poner a un mudo frente a un micrófono. Pero voy a comprobar que estas redes sociales son el lugar indicado para esta orgullosa casta de inadaptados.

Hace un año, tal vez dos, yo utilizaba el servicio de un sitio que se llamaba por aquel entonces “cumplealerta.com” y como su nombre lo indica, me avisaba sobre cumpleaños que yo le iba cargando. Debo reconocerlo sin tapujos, si fuera un 10% mas boludo me olvidaría de mi propio cumpleaños.

Tiempo después me llega un e-mail avisándome que Sónico compraba este sitio y que todos los inscriptos teníamos que inscribirnos ahí para seguir usando el servicio. Que era una red social en crecimiento, que iba a conseguir amigos, que bla bla bla. No me importó mucho, me inscribí porque daba lo mismo.

Mientras el tiempo pasaba, yo seguía inscripto y sin saber qué era Sónico. Me llegaban invitaciones de este sitio, pero también de Tagged, Hi5 y el súper popular Facebook. Ya era tal la cantidad de gente que quería que fuera “su amigo”, a pesar de no darme ni cinco de pelota cuando los saludo en el MSN, que decidí reactivar mi olvidada cuenta y ver de qué se trata esta patraña.

Por comentarios de otros que eran miembros de Facebook tuve la certeza de que ambos sitios eran muy similares y que a pesar de la notoria diferencia de cantidad y actividad de miembros, podía utilizar a Sónico como sitio de referencia.

Primera impresión… ¿qué es eso de “fulano quiere ser tu amigo”? ¡Ni sabe quién soy ni intercambió una palabra conmigo!. Entré a un par de perfiles y noté que algunos eran muy populares, algunas mujeres incluso superaban los ¡mil amigos!. Aquí es donde notamos la orientación real de estas redes hacia el inepto: el sitio intenta dar a sus miembros una falsa sensación de tener amigos y ser queridos por multitudes. Algo que para el inepto social en el mundo real no es más que una utopía.

Hay pedidos de “amistad” en masa. Cuando alguien se inscribe, estos sitios amablemente nos quitarán el trabajo de elegir a nuestros propios amigos. Ingresando nuestros datos para entrar al MSN les enviará a todos nuestros contactos una cordial invitación a unirse a la red y si ya se habían unido, les avisa que querés ser su amigo. ¿No es genial? Después muchos se preguntan de dónde saca uno los amigos…

Los perfiles femeninos destilan histeria, los masculinos también, pero menos. Algo que también se vive en la vida real. Punto para la red social.

Generalmente los perfiles llevan fotos y las mujeres suelen posar como primeras vedettes del Maipo. Escotes, push-ups, poses y expresiones libidinosas en sus rostros… todo hace suponer que estamos frente a una horda de lobas comehombres de todas las edades, pero no. Los machos de gimnasio no dudan en poner sus fotos pelando lomo como si estuvieran participando del Mister Olimpia. Un detalle más: las mujeres feas son una minoría bastante pequeña, al menos en los perfiles argentinos. Evidentemente evitan mostrarse en estos sitios.

Hasta acá, todo parece un ámbito donde todos suman amigos y están de levante. Los álbumes de fotos tienen la modalidad de permitirles a todos o solamente a los “amigos” -no lo sé bien- hacer comentarios. Aquí los comentaristas se convierten en galanes y/o poetas de cuarta que parecen competir por el piropo mas grasa y cursi posible. Todo esto aderezado muchas veces con faltas de ortografía dignas de un disparo. En otras ocasiones dejan comentarios como si fueran amigos de toda la vida. Todos son complacientes e insoportablemente adulones.

Segunda impresión: el inepto tiene “amigos” al alcance de la mano. Difícilmente alguien le rechace su pedido de “amistad” (¿desde cuando la amistad se solicita?) y como si esto fuera poco, puede poner alguna foto con ese circo de freaks al que llama familia y recibir la adulación de un montón de desconocidos, perdón, “amigos”. No se puede pedir más, esto es el cielo.

Ojo, la cosa se pone buena. Se forman grupos donde la gente que comparte un gusto o lema determinado puede unirse. ¿Qué se logra con esto? Absolutamente nada, pero ahora el inepto se siente parte de algo. ¡Ahora es alguien y tiene amigos que comparten sus gustos! ¡Y todo a algunos clicks de distancia!

Otra posibilidad que brinda este sitio es permitirle a un miembro dejar videos o tarjetas digitales a un “amigo”. Al rato uno entra a su perfil y lo ve invadido de videos de Ricky Martin y Christian Castro o videos religiosos o enseñanzas sobre la importancia del amor y la amistad que entran perfectamente en la categoría: ¿And who fucking cares?. Con las fiestas, llegan todo tipo de tarjetas llenas de frases hechas. Luego, a esos mismos “amigos” les enviás un mensaje por el sitio o directamente por MSN y ni te contestan.

El inepto social tiene aquí otra herramienta… en su inagotable torpeza para socializar, puede ser déspota y dictatorial con sus nuevas amistades virtuales y esto lleva a todos a esa adulación permanente que yo mencionaba antes. Donde alguien tenga la osadía de no ser complaciente, será eliminado y bloqueado. El inepto no puede tolerar que alguien le salga cuestionando cosas. Ahí ya no hay lugar para la amistad.

Paremos la mano, parece al final que estas redes sociales no son más que un antro de retardados que las usan de bastón, pero con un simple cálculo podemos darnos cuenta de que no es así. ¿Saben cuántos millones de usuario tiene Facebook? No viene al caso, lo que importa es que no hay tantos ineptos sociales. O al menos, eso quiero creer en un arranque de optimismo poco común en mí.

Esto es una ensalada donde hay de todo. Hay gente normal que organiza eventos de verdad donde asiste gente de verdad, hay gente que lo usa para el verdadero propósito que estas redes tienen (marketing, vender, ganancias, colocar productos), hay gente que está porque se considera cool, hay gente que está porque cree que si no está no existe, hay gente que está totalmente de levante, hay gente que posa para ver si alguien los convoca para una agencia de modelos o un casting y por supuesto, está el inepto social puro.

Por supuesto, nadie invierte las fortunas que cuesta mantener estos sitios ni soporta las enormes pérdidas que dejan pensando en el bienestar de los ineptos sociales. Ellos se apropiaron de estos sitios para su beneficio y me parece muy bien. Cada uno puede darle el uso que más le convenga y si bien vamos todos a parar a las bases de datos de varias compañías de marketing, es importante saber que de una forma u otra vamos a estar ahí.

Eso si… no crean que eso es hacer amigos, por favor….

lunes, 4 de febrero de 2008

Una de Buenos y Malos

Viendo televisión o escuchando radio, uno tiene la sensación de ver casi permanentemente una bajada de línea de ideologías enfrentadas. En realidad, es mucho mas que una sensación. Los medios están plagados de gente que pugna por impulsar hacia el público las ideologías con las que simpatizan ya sea por convicción o conveniencia, como si fueran cruzados que usan los medios para evangelizar en lugar de ser comunicadores imparciales (que es lo que deberían ser).

De un lado, está la izquierda. Humanistas, inclusivos, tolerantes, igualitaristas, afectos a todas las causas nobles y a la corrección política. Denuncian todo atisbo de censura y repudian el accionar de Estados Unidos, haga lo que haga. Están en contra de la contaminación, los gases invernadero, las matanzas de ballenas, la discriminación, la homofobia, la xenofobia y el antisemitismo. No dudan en señalar y repudiar a viva voz a quién piense de otra forma. Imaginan una aureola blanca flotando sobre sus cráneos. Se horrorizan con Radio 10 y canal 9. Sus enemigos declarados son los fachos y los nazis.

Del otro lado, está la derecha. Monetaristas, católicos en su mayoría. Repudian las dictaduras, salvo que se trate de una guerra contra guerrilleros de izquierda. Son clasistas y consideran que hay gente inferior y superior. Cuanto mas oscura sea la piel, más chances hay de ser personal doméstico. Ven a Estados Unidos como el faro de la libertad que lucha incansablemente contra los dictadores comunistas que asolaron al mundo, como Stalin, Mao o Fidel Castro. Creen que hay que asesinar sin piedad a los delincuentes y reprimir a todo aquel que altere el orden establecido para expresar su descontento. Aseguran que el calentamiento global es una gran mentira. Son la gente mala que corre tras el poder pisoteando a quién se interponga en su camino. Sus enemigos declarados son los zurditos, bolches y comunistas.

Puede ser que haya sido un tanto irónico en la descripción, pero creo que no es del todo desacertada. Por supuesto, solamente se trata de un análisis superficial y no es por eso que decidí escribir esta nota. La idea es demostrar que la gente buena no es tan buena y la gente mala no es tan mala. A pesar de parecer totalmente opuestos, son prácticamente iguales. A continuación, voy a detallar y analizar una serie de eventos reales que demuestran que las ideologías no son mas que instrumentos para personas que no están en condiciones de razonar.

Muerte Gratis
Situación 1:
Julio Oscar Serdán era suboficial auxiliar de la policía federal y trabajaba en la comisaría segunda. El 19 de abril de 2007 cumplía un servicio adicional y estaba vigilando la esquina de Av. Córdoba y Palestina. Vio que dos motochorros asaltaban a un hombre que salía del banco francés, les dio la voz de alto, pero ellos inmediatamente comenzaron a disparar a quemarropa dándole varios tiros en el abdomen y el pecho. Al día siguiente, a la edad de 50 años, falleció en el hospital italiano.
Es posible que muchos de ustedes recién se enteren de este hecho, ya que los medios lo informaron muy sintéticamente. Ningún periodista sensible y progre se indignó por el hecho. No se escucharon voces de lamento ni condolencias para los familiares del fallecido. No hubo ninguna marcha de repudio a la violencia. Ningún centro de estudiantes de ninguna universidad pública organizó un acto. Claro, era policía. Por supuesto, quienes se indignaron y dejaron su afecto a la familia de Serdán fueron los periodistas de derecha, que no desperdiciaron otra gran ocasión para pedir penas mas duras y mas poder para la policía.

Situación 2:
El 26 de junio de 2002 el Movimiento de Trabajadores Desocupados, en medio de la gran crisis post-devaluatoria, organiza una protesta piquetera cortando el puente Avellaneda. La policía bonaerense inicia una represión desmedida disparando balas de goma a la multitud. El inconveniente, es que no todas eran de goma.
Maximiliano Costequi (o Kosteki, no lo tengo claro), de 25 años, cae mal herido por un disparo dentro de la estación de trenes de Avellaneda. Darío Santillán, de 21 años, va a socorrerlo. Se arrodilla al lado de él para verificar su estado y comienza a gritar que paren de tirar y pide una ambulancia. Inmediatamente aparecen en escena varios policías y entre ellos, el entonces comisario inspector Alfredo Franchiotti portando una itaka. Cuando Santillán intenta pararse para salir al patio de la estación, Franchiotti le dispara por la espalda a unos cinco metros de distancia. Mientras se desangra, Santillán es llevado arrastrado al exterior del hall por dos policías. Una vez afuera, el propio comisario Franchiotti toca su carótida para testear su pulso. Fueron trasladados al hospital Fiorito, pero llegaron muertos.
Por unos días, en el medio del revuelo no se supo quién había disparado, hasta que apareció una secuencia de fotos que publicó Clarín donde se veía claramente todo lo que relaté anteriormente. Las mismas personas que no se inmutan ante la muerte de un policía en el cumplimiento de su deber, no dudaron en bautizar a este hecho como "La masacre de Avellaneda". Es decir, un policía muerto es un hecho menor, dos piqueteros es una masacre. Supongo que tres muertos entonces ya sería un genocidio.
Fuera de estas cuestiones puramente numéricas, este hecho fue el puntapié inicial para que el entonces presidente Eduardo Duhalde llame a elecciones para abandonar el cargo cuanto antes. Las agrupaciones de izquierda hicieron cuantiosos actos en memoria de los piqueteros caídos, que hoy son recordados como héroes.Todos los años, la agrupación Anibal Verón corta el puente de Avellaneda para recordar la tragedia. Los periodistas de izquierda se solidarizan con los piqueteros. Los periodistas de derecha recalcan la violencia de los piqueteros y recuerdan el hecho al pasar, como si contaran que hubo un choque de bicicletas en una esquina.

Conclusión:
Siendo dos hechos totalmente diferentes, tienen en común que se trataron de muertes de inocentes. Es entendible una muerte en un tiroteo, pero no es aceptable que alguien armado asesine a sangre fría a otro que no tiene con qué defenderse o que al menos, ni siquiera atinó a hacerlo. La conclusión que saco, es que a nadie le importó esto. No importa para esta gente que se asesine sin motivos a alguien. Lo que importa es quién es el asesino y quién es el asesinado. De acuerdo a la simpatía que le tenga al muerto, me lamento o me hago el boludo. Básicamente en esto, la derecha y la izquierda piensan igual.


Libertad, Libertad, Libertad
Situación 1:
En la década del ’70 América latina se había poblado de numerosos grupos guerrilleros y terroristas de ideologías, en general, marxistas. En Argentina grupos como MTP o Montoneros se adjudicaban decenas de actos de violencia, bombas, secuestros y asesinatos. El mas conocido de los montoneros, el secuestro y asesinato del ex-dictador Pedro Eugenio Aramburu. En Estados Unidos, mientras tanto, se graduaban en la “Escuela de las Américas” los futuros dictadores del continente. Esta institución enseñaba a los militares la forma de combatir agrupaciones de izquierda tanto paramilitares como sociales. De aquí egresaron militares ilustres como Galtieri, Viola, Noriega y Pinochet, entre otros.
El gobierno de Perón se había desentendido de los grupos violentos de izquierda del movimiento y le dio poder a los grupos violentos de derecha manejados desde las sombras por el “brujo” José Lopez Rega. Muerto el general, heredamos su último legado: que una mujer salida de un cabaret sin la menor formación asuma la presidencia de la nación. Esto afianzó más el poder de la “Alianza Anticomunista Argentina” conocida entre los amigos como “la triple A”. El país se convirtió en un campo de batalla y los militares, que perdían hombres día tras día en los atentados guerrilleros, le dieron el ultimatum a Isabel.
El 24 de marzo de 1976 los egresados de la escuelita tomaron el poder y dieron inicio al “Proceso de Reoganización Nacional”. Era una fase más de la “Operación Cóndor” que incluía golpes de estado en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay. La idea era que todas esas dictaduras del continente cooperaran entre sí como si fueran una asociación clandestina que impone el terrorismo de estado para combatir el terrorismo de izquierda.
La dictadura argentina duró 2818 días. En ese tiempo se estima –según datos de la CONADEP- que eliminaron a aproximadamente 30.000 personas. Se suprimieron los derechos civiles. Secuestraban y torturaban a cualquiera para obtener información solamente por figurar en una agenda. Se perdió una guerra con consecuencias que aún pagamos y casi entramos en otra con Chile. Se destruyó la industria y la deuda externa del estado pasó de dos mil millones a cuarenta y cinco mil millones de dólares. Aumentó la pobreza en forma alarmante. Las consecuencias sociales dejaron huellas que se van a sentir varias décadas después. Desde 1930, con el golpe de Uriburu a Yrigoyen, el ejército argentino una y otra vez se sintió con el derecho de tomar el poder para “salvarnos” del desastre. Esta dictadura fue tán mala que no dejó lugar a que ni siquiera los mismos militares vuelvan a pensar seriamente en hacer algo así.
Ya retornada la democracia, los grupos de izquierda se encargaron de agitar el juicio a los militares (hecho inédito en la historia del continente). Inculcaron la frase “treinta mil desaparecidos” casi como un slogan publicitario. Hicieron todo tipo de marchas, actos y conmemoraciones a los desaparecidos. Agitaron hasta donde pudieron el sentimiento de odio hacia el ejército y la policía. No dicen absolutamente nada de los guerrilleros de izquierda y de hecho, no hablan de la gente a la que mataron ni de la cantidad. Inclusive en muchos casos, reivindican la guerrilla y quienes la mencionan hablan de los guerrilleros como heroes.
La derecha asegura que la dictadura era necesaria debido a que el país estaba asolado por varios grupos guerrilleros sin control. Que no desaparecieron treinta mil personas y que no llegan ni a seis mil. Inclusive hay quienes dicen que hay registros donde no llegan ni a trescientos. Dicen que la dictadura, en realidad, fue una guerra contra los ejércitos marxistas que querían tomar el poder. Este concepto es bastante discutible, porque que en su momento se les prohibía a los propios soldados decir que eso era una guerra ya que si así fuera, se debía respetar el tratado de Versalles y no podrían haber hecho todas las barbaridades que hicieron. Además, todas las agrupaciones terroristas estaban desbaratadas en menos de dos años, no había motivo entonces para que los militares se queden cinco años más en el poder.

Situación 2:
En la pequeña isla caribeña llamada Cuba gobernaba el presidente constitucional Carlos Prío Socarrás. El 10 de marzo de 1952 el general Fulgencio Batista dio el golpe de estado y derrocó a Socarrás. La dictadura de Batista duró hasta 1954, donde llamó a elecciones y él mismo ganó prometiendo terminar con la corrupción, cosa que no sólo no hizo, sino que empeoró.
Tan escandaloso era el nivel de corrupción que todos los sectores partidarios, sindicalistas y empresariales se le volvieron en contra. El propio gobierno de Estados Unidos, que era el que lo sostenía, le cortó el suministro de armas. En un clima revolucionario cada vez mas álgido, entre 1953 y 1958 la guerrilla liderada por el "Che" Guevara y los hermanos Fidel y Raúl Castro hicieron distintas acciones desestabilizadoras hasta que por fin, el 1 de enero de 1959 derrocaron a Batista.
El principal sostén de la revolución era la Unión Soviética, que veía con muy buenos ojos la formación de un estado comunista en este continente, mientras que Estados Unidos hacía planes para derribarlo cuanto antes.
El gobierno revolucionario instauró las políticas de todo estado comunista que se precie. Todo opositor fue encarcelado y torturado, los medios de comunicación pasaron a estar bajo el control del gobierno. Los cubanos ya no podían irse de la isla y de hecho, hasta el día de hoy no tienen mucha noción de lo que pasa en el mundo exterior, salvo lo que el gobierno les deja enterarse o lo que los turistas les cuentan, cuando la policía los deja acercarse. Miles de cubanos murieron tratando de escaparse de la isla en embarcaciones precarias huyendo hacia la costa norteamericana. La opresión del estado es absoluta, no hay oposición formal, no hay elecciones, ni siquiera el acceso a internet es total como en cualquier otro lado porque podría utilizarse como un medio de comunicación muy mal visto por el gobierno. La única oposición se encuentra en Estados Unidos y está formada por la gente que logró escapar de la isla.
A partir de la asunción del gobierno revolucionario, Estados Unidos comenzó a tomar medidas de aislamiento económico sobre la isla. En 1962 Kennedy formalizó el bloqueo comercial definitivo que dura hasta nuestros días. A Fidel Castro no le importó sus consecuencias, cuando él mismo era el motivo de esa medida. Al caer la Unión Soviética en 1991, la isla perdió su principal sostén económico y quedó librada a su suerte. Hoy Cuba tiene un atraso extraordinario, escasea todo y viven prácticamente del turismo. Curiosamente, utilizando políticas contrarias al socialismo que pregonan, como tener una moneda paralela para los turistas que está 1 a 1 con el euro mientras que los cubanos tienen su propia moneda que no vale nada. Los cubanos se jactan de que en el mundo hay gente que muere de hambre, pero ninguno es cubano. Sin embargo, la Cuba comunista, socialista e igualitaria, tiene zonas exclusivas para extranjeros millonarios que decidieron casarse con cubanos y vivir ahí. Esa gente, obviamente, tiene vía libre para salir y entrar a la isla cuantas veces quiera.
La gente de izquierda ve a Cuba como un ícono de la historia. Le echan la culpa de todos los males de la isla al bloqueo comercial y niegan de todas las formas posibles el hecho irrefutable de que es una dictadura terrible que lleva casi cincuenta años. Mientras que hablan las peores pestes de los dictadores argentinos, mencionan con orgullo a Fidel Castro como "El comandante". Cuando no tienen forma de negar que Castro es un tirano, cambian de tema y hablan de las políticas sociales, de la medicina, etc. como si eso fuera un gran justificativo para un gobierno así. Jamás hablan de la gente que el gobierno cubano asesinó, ni de cantidades, ni de las torturas ni nada por el estilo. Exaltan los derechos humanos siempre, menos cuando se habla de Cuba.
La derecha carga contra Fidel Castro como si fuera el peor dictador en la historia de la humanidad. Recalcan el hambre que pasan los cubanos, sin hacer mención directa al bloqueo. Señalan y condenan las faltas de libertades en la isla. Hacen todo tipo de conjeturas acerca de la muerte de Castro, sobre todo en estos últimos tiempos debido a sus problemas de salud. Con seguridad, el día de su muerte, muchos van a festejar.

Conclusión:
Es bastante confuso el concepto de libertad y de derechos. La gente de izquierda se indigna frente a los "fachos" y dictaduras como las que tuvimos acá, pero es indulgente y complaciente con la dictadura socialista de Fidel Castro. La gente de derecha desea la muerte del dictador cubano, pero minimiza la dictadura local y la justifica argumentando que se trató de una supuesta "guerra".
Siempre se puede justificar cualquier barbaridad, siempre se puede tapar lo que no conviene y exhibir lo contrario. Se puede decir que la dictadura argentina obró así porque aparentemente vivimos esos siete años y medio de batalla en batalla contra la amenaza del comunismo y está todo bien. Se puede decir que Fidel Castro tiene que hacer lo que hace porque Estados Unidos es peor y está todo bien. Pero una dictadura es una dictadura. Una tiranía es una tiranía. No importa quién y por qué la haga, está mal y punto.
Si alguien considera que una dictadura es buena porque responde a su signo ideológico y es repudiable porque es contraria, es un hipócrita y un idiota. Y son muchos. Para ellos no importa que un presidente sea democrático o tirano, solamente importa que haya leído el mismo librito que uno. En este punto también la izquierda y la derecha piensan igual.

Para Terminar
No escribí esto con la idea de hacer un texto demasiado largo cargado de información, pero es justo explicar ciertas cosas de la forma mas completa posible para poder elaborar una conclusión que no suene a parcial. Si algo nos hizo mucho daño y nos engordó los cementerios, fueron las ideologías y sus vaivenes. Espero que algún día la gente piense por sí misma y no deje esa tarea en manos de otros porque simplemente escribieron algún libro con ideas que les cayeron simpáticas.

Hasta la próxima

martes, 25 de diciembre de 2007

Verano Predecible

El 21 de diciembre -según el calendario gregoriano- arranca el verano. Es la etapa de tres meses en la cuál el hemisferio sur del planeta se encuentra mas cerca del sol. Calor y más calor. Pero a diferencia de las otras tres estaciones, el verano tiene una liturgia sobrecargada que lo convierten en el trimestre mas predecible de todo el año. Por supuesto, la predictibilidad varía de acuerdo a la cultura del lugar geográfico que se mire. En Argentina puedo asegurar que año tras año se suceden los mismos acontecimientos -alterados obviamente por modas y tendencias de cada época- y digámoslo abiertamente... es la estación mas ignorante de todas. Ninguna otra fomenta la superficialidad y la frivolidad como esta. También el verano es muy esperado por mucha gente, porque es sinónimo de descanso, joda y movimiento turístico/monetario. De hecho, hay gente que vive todo el año de lo que gana en el verano.

El día exacto en el que arranca la estación, Crónica TV nos anuncia con bombos y platillos que... "¡¡ESTALLÓ EL VERANO!!". Acto seguido, nos anuncia que restan noventa días para el inicio del otoño. ¡Eso es un noticiero, carajo!

La gente, luego de sufrir un calor espantoso ya desde hace tiempo, sigue comentando la temperatura como si fuera algo novedoso y sorprendente. Las minas empiezan a salir más en bolas y pareciera que de repente, están todas buenas.

Las Fiestas
Apenitas arrancado el verano, entramos en esa semana trágica llamada "las fiestas". La gente solitaria se deprime y piensa en el suicidio. Los matrimonios y similares entran en un tira y afloje acerca de dónde pasan navidad y dónde año nuevo. Empiezan las complicaciones porque hay peleas internas en la familia.

- Si vamos a lo de mamá, que no venga mi primo porque no lo quiero ni ver después de haberme cagado guita con el asunto de la venta del auto.
- Entonces vamos a lo de tu vieja en navidad y que tu primo vaya en fin de año. Llamala y decile.

Llama por teléfono a la madre:
- Hola, ¿mamá? Habla tu hijo preferido. Oíme, vos sabés que con el rafa no me llevo bien. ¿Qué te parece si nosotros vamos en navidad y él en año nuevo?
- El ya me dijo que viene en navidad... a mí no me gusta verlos peleados. Cuando los vi discutir tuve un pico de presión.
- Qué macana... ya arreglamos con mis suegos que íbamos a ir allá en año nuevo.
- Está bien... andá... olvidate de tu madre... algún día no me vas a tener mas...
- Pero mamá... ¡no seas fatalista!
- No te preocupes por tu madre... menos mal que tengo un sobrino como el rafa... (corta)

- Mamá se puso mal, ahora no sé qué hacer... deberíamos pasar fin de año con ella.
- ¡Ah no! Ya arreglamos con mis viejos... van a hacer lechón para treinta personas y yo les dije que llevaba el ananá fizz, no vamos a complicar todo por la rompebolas de tu vieja.
- ¡No hables así de mamá, la puta que te parió!
- ¡Me tenés harta, quiero el divorcio!

En fin, otra familia destruída por las malditas fiestas. Pero las que sobreviven a esta verdadera prueba tienen que pasar estoicamente un supuesto festejo de algo que a nadie le importa. ¿Por qué carajo brinda la gente en nochebuena? ¿Por Jesús? ¿Por Papá Noel? No todos saben para qué están ahí, pero hay que seguir la tradición como sea. El asunto es brindar a las doce y decir ¡Felicidadeeeeeeeeees!.

La televisión nos bombardea con publicidad navideña que además de reiterativa, es absolutamente ridícula. Uno está frente al televisor una tarde con 34 grados de sensación térmica observando una publicidad de coca cola donde los niños hacen un muñeco de nieve y aparece un gordo pelotudo vestido de Santa Claus con un abrigo rojo como para ir a la Antártida y todos ríen a su alrededor. Vos lo mirás y te da más calor. Cambiás de canal y suena un villancico. Nada tiene que ver con nosotros, no es más que pura invasión cultural que uno absorbe sin entender por qué.

Les mentimos a los niños diciéndoles que va a venir Papá Noel a traerles regalos, que en Estados Unidos es Santa Claus y en Chile es el Viejito Pascuero. Curioso, porque es pascuero pero viene en navidad en lugar de venir en pascuas. Les decimos que sale el 24 a la noche, entra en las chimeneas de las casas y les deja regalos a cientos de millones de niños alrededor del mundo y lo hace todo en una sola noche. Encima, los carga en un trineo de mierda que vuela y es empujado por seis renos. La imágen del gordo entrando a la chimenea no tuvo ninguna adaptación a un edificio en una ciudad. ¿Por dónde carajo entra en el departamento del 5to. H? ¿Cómo lleva tantos regalos en una bolsa? ¿Toma merca?

Todo el mundo, al igual que en el día del amigo, manda e-mails con tarjetas electrónicas y saludos que evidentemente fueron copiados y pegados. Los mismos cuatro o cinco powerpoints se multiplican en la red y de hecho, yo recibí uno de un árbol de navidad armado con palabras no menos de cuatro veces. Los deseos en las fiestas son totalmente desmedidos. "Que todos tus sueños se hagan realidad" ¿Ah, si? ¿Inclusive voltearme a tu hermana? Es como si la realidad estuviera guionada al igual que una obra de teatro. Las personas van a comprar a un lugar o se saludan por la calle y dicen "felicidades". La gente se desea "mucha prosperidad". ¿Prosperidad? ¿En qué otro momento del año usan esa palabra?

La familia se reúne alrededor de la mesa navideña. La comida está atiborrada de calorías en el peor momento del año para consumirlas. Nueces, almendras, castañas, avellanas y hasta el mismo pan dulce son comidas claramente invernales. Nosotros, que somos capaces de solucionar una falla en un taxi espacial en pleno vuelo con una pinza pico de loro y un puntero láser, nos podemos adaptar tranquilamente a todas las tradiciones del hemisferio norte (donde hace un frío de cagarse) y seguirlas al pie de la letra.

Las mesas donde se junta mucha gente suelen estar compuestas por parientes que solamente se ven en esas reuniones y no saben un carajo unos de los otros. No es lugar para ponerse a inventar lazos que nunca existieron, así que lo mejor es pasarse la noche hablando del clima, de las noticias o de la vida de otros parientes que no están presentes. Luego todos volverán a su casa con la silenciosa pero implícita promesa de volver a verse cuando otro pariente haga otra reunión donde los invite o en la gran reunión familiar que suele encarnar un velorio.

Llegan las doce y empieza fuerte la pirotecnia. Los gerontes de la mesa repiten año tras año alguna frase del tipo "qué manera de tirar cohetes" casi con asombro, como si fuera una novedad. El "adulto responsable" sale a tirar petardos con los niños de la familia y vuelve con un dedo menos a causa de una bomba de estruendo que misteriosamente le explotó en la mano. Los adolescentes, que se pasaron toda la noche mandando mensajes por el celular, se ponen impacientes esperando el momento para huír. A la abuela, que tiene todo tipo de restricciones alimentarias impuestas por el médico, le dan vía libre para comer y chupar, porque total... "es nochebuena, déjense de joder". Al otro día, están internando a la vieja.

La celebración de fin de año, más allá de todo esto, es mas acorde a mis gustos. Mas pagana. Menos mentiras y boludeces, simplemente festejar el inicio de un nuevo año. Nada de religión empañando la alegría de alguien que podría querer empezar el año mamado y enfiestado con dos trolas.

Las vacaciones
Por algún motivo que aún desconozco, al 70% de los argentinos (que trabajan) le dan vacaciones durante el mes de enero. Los cambios de quincena son espantosos. Cualquier lugar por más inmundo que sea se llena de gente queriendo escapar de su lugar de origen. En los lugares mas top te cuesta medio salario el alquiler de una bicicleta por una hora y por tomar una cerveza te cobran lo que habitualmente te cobrarían por un almuerzo para dos en una parrilla. En los lugares mas populares las playas se atiborra de gente y se dividen entre los que compiten por hacer alarde de su graserío con los que pretenden ser top en un lugar que evidentemente no lo es.
La playa se convierte en un campo de concentración donde se compite palmo a palmo por cada centímetro de arena disponible y encontrar la tranquilidad rodeado de familias con niños que revolotean y desparraman arena sobre uno es absolutamente imposible.

Las familias numerosas hacen la rutina de levantarse temprano, juntar las sombrillas, bolsos, heladera, cosas para los chicos, lonas, toallas, comida y se van temprano a la playa para conseguir lugar. Llegan mas temprano que lo que llegan habitualmente al trabajo. Estacionan el auto donde pueden, que generalmente es a dos cuadras o más y emprenden el éxodo hacia la arena. Una vez que acomodaron todo el equipaje se quedan diez horas como mínimo. Almuerzan toda la comida aderezada con arena y tienen que vivir refugiados debajo de la sombrilla porque apenas hay lugar para moverse. Cuando el sol ya bajó, de vuelta a juntar todo y hacer el éxodo hasta el auto, esta vez escoltados por una multitud que decidió irse en ese mismo momento y hacer todo el camino mas lento y complicado. Al volver al auto, estarán mas cansados que en un día laboral normal. ¿Y las vacaciones cuando empiezan?.

Salís a la noche y hay cola para estacionar, cola para entrar a un restaurante, cola para entrar al cine, cola para comprar cigarrillos en un kiosko, cola para mirar una vidriera, cola para subir a un colectivo y cola para entrar a un locutorio. Todo es un eterno esperar. Claro que como uno está de vacaciones no tiene apuro y puede cenar a las dos de la mañana... ¿qué problema hay?

Las ciudades turísticas estrenan su temporada de teatro. Cuando alguien menciona al teatro, podría estar hablando de cultura, pero no. Nada mas alejado. Empiezan a proliferar obras con nombres como "Mas pinas que las gallutas", "El champán las pone mimosas" o "Mas caliente que una pava".

Las reinas de pacotilla
El interior del país se regocija con sus concursos locales eligiendo a sus reinas. La reina del río, del lago, del charco y del carnaval de no sé dónde. Reconquista elige a la reina del surubí, Río Negro a la reina del tomate, Santa Fé a la reina del algodón, Mar del Plata a la reina del mar, Chacabuco a la reina del maíz y todas quieren que las contrate Tinelli. Evangelina Carrozzo (la reina del carnaval de Gualeguaychú de 2007) es un faro que las guía hacia el estrellato. No todas correrán con esa suerte, por supuesto, no todas encontrarán alguna causa justa y mediática para exhibirse y usarla de trampolín. En Uruguay, Botnia hace rato inició sus tareas y la abanderada de la ecología está muy lejos de ahí... sobre un escenario de Sofovich. Le salió bien, hay que reconocerlo.

La televisión
De repente, la caja boba se emberreta y los programas de "espectáculos" ganan la pantalla. Todos transmiten desde la playa (¡qué original!), hacen notas sobre culos (¡qué original!) y entrevistan a chicas que toman sol boca abajo (¡qué original!). Los temas candentes son los cruces verbales prearreglados entre vedettes y todo se convierte en un entretenimiento de poca monta y una publicidad permanente sobre obras de teatro en la costa. Empiezan las notas nocturnas mostrando la "movida" y consisten en un notero a los gritos en un boliche preguntándole pelotudeces a la gente y juntándola para una toma cosa que dé la sensación de multitud.

Aparecen nuevos programas que pretenden sobrevivir al verano para ver si les dan continuidad durante el año. Mirta Legrand transmite su programa desde un hotel mientras el palurdaje, que está al reverendo pedo, se amontona en la puerta a la espera de que su estrella asome la cabeza.

Si bien todas las estaciones tienen sus tradiciones y costumbres, creo que definitivamente el verano es la que más ingredientes tradicionales tiene. Algunos la odian por el excesivo calor, otros la aman. Lo cierto, es que la gente no tiene nada que hacer y está para cualquier cosa.

¡Que tengan un muy buen 2008!

martes, 13 de noviembre de 2007

La leyenda sin sentido del martes 13

Esto del martes 13 me suena a una estupidez similar a lo que es el día del amigo. Es decir, es una fecha que remite a un significado supuestamente importante, pero con un origen que no tiene el menor de los sentidos. ¿Por qué supuestamente vamos a padecer todo tipo de reveses en esa fecha? ¿Por qué la gente se cree cualquier cosa? No tengo una explicación concreta al segundo interrogante, pero voy a intentar indagar en el primero.

El 13, mucho mas que un canal
Investigando acerca de este numerito, encuentro datos por los cuáles presumo que no goza de la mejor de las famas. Es cierto que a veces se exagera con el uso de un número buscándolo en todas las formas posibles para darle un significado aunque sea por la fuerza (ver la película Number 23 protagonizada por Jim Carrey).

Aparentemente, este número comenzó a utilizarse como símbolo de mala suerte ya en la mitología nórdica. Cuenta la leyenda que se hizo un banquete en el Valhalla -algo así como una estancia que oficiaba de paraíso para quienes morían de la forma mas noble, o sea, en combate- y se invitaron a doce dioses, pero Loki -el dios de la pelea y el mal- se enteró de que no lo habían invitado y fue disfrazado de anciana, con la intención de cobrarse una vieja cuenta pendiente. Esto hizo que la cantidad de invitados o mejor dicho, dioses, llegue a trece. La cuenta pendiente de Loki era con Baldur (o Balder), hijo de Odín, el dios mas importante. Sin entrar en detalles -aunque confieso que la mitología nórdica es muy interesante- mediante engaños, Loki le dio una especie de lanza a Hodur, el hermano ciego de Baldur, y le dijo que se la arroje, que era inofensiva. La lanza se clavó en el pecho de Baldur matándolo al instante. Para colmo, como era el dios de la luz y de la verdad, todo se sumió en la oscuridad y eso propició la llegada del Ragnarok, que era algo así como una pelea final de dioses, los amigos de Baldur contra los de Loki. O sea, todo mal.

Luego, se reforzó la fama del trece cuando Jesús en la última cena no tuvo mejor idea que juntar a sus doce apóstoles que sumados a él, formaban trece comensales. Y ya sabemos cómo le fue a Jesús. Como hechos menores, podemos sumar que en el apocalipsis se habla de la venida del anticristo adivinen en qué capítulo... así es, en el trece y que en el tarot este número simboliza a la muerte.

En muchos edificios del mundo y hasta en hoteles, los pisos saltan del doce al catorce, en una verdadera demostración de superstición al servicio del cliente. ¿Para qué poner un piso trece al cuál mucha gente no querría ir? ¿Un departamento en el piso trece valdría igual que en el doce? En la mayoría de los autódromos del mundo los talleres donde los autos hacen el mantenimiento durante la carrera también saltan del doce al catorce y en muchas aerolíneas lo mismo sucede con las butacas de los aviones.

Del número al almanaque
Ahora, el verdadero problema es por qué el trece, que por si solo tiene su fama bien lograda, se une al día martes o viernes. En Latinoamérica se considera de mala suerte al martes debido a que este día de la semana representa al planeta Marte (cada día de la semana, salvo el domingo, representa a un planeta o satélite). El asunto es que Marte es el planeta rojo, que representa a la sangre y la destrucción y en la mitología griega, simbolizaba al dios de la guerra. Un martes 13, también, se produjo la confusión de lenguas en la Torre de Babel que la llevó a su destrucción.

En los países anglosajones, en cambio, prefieren tenerle miedo al viernes 13. La saga de películas de terror de Jason (aquí traducidas como martes 13) ayudaron a acentuar la superstición. El origen de esta creencia se remonta al viernes 13 de octubre de 1307, donde los Caballeros Templarios fueron delatados ante la Santa Inquisición lo que provocó el arresto de todos ellos esa misma noche y la condena a morir en la hoguera. En el momento de ser incinerados, emitieron todo tipo de improperios y maldiciones a las cuáles aún se les teme. Hay puristas, sin embargo, que prefieren tenerle miedo al martes y al viernes. ¿Para qué arriesgar?.

Conclusión: mas de lo mismo
Y si... como toda superstición, es rebuscada y pretende condicionar nuestras vidas en base a explicaciones que no tienen el menor sentido. El hecho de que el planeta Marte sea rojo no tiene relación alguna con que uno vaya a tener mala suerte en un día martes. Que en la última cena hayan comido trece personas no es razón para que alguien no quiera hospedarse en el piso trece de un hotel. Todo esto presuponiendo, claro, que alguien entienda su puta superstición y de dónde viene, porque lo mas ridículo de esto, es que todos afirman la mala suerte, pero nadie entiende por qué cree en eso. Simplemente es una creencia estúpida que se transfiere de padres a hijos.
Espero que esto le sirva a los ignorantes que creen en estas payasadas. Yo rescato como positivo el haber aprendido algo de la mitología nórdica, que recomiendo a quienes se fascinan regalándole la vista al señor de los anillos o Harry Potter. Cuando estén chicatos en la eterna pelea con los lentes de contacto, llegará el momento de preguntarse si valió la pena arruinarse los ojos para leer esa boludez.